"El diseñador es el profesional que diseña", "diseñar, acción de hacer diseño", "diseño: Actividad que tiene por fin, diseñar". Así, encontramos (en internet, libros, diccionarios y diferentes medios) definiciones cortas, banales, redundantes y sin conceptos necesarios al momento de indagar sobre DISEÑO.
Hoy en día nos referimos al diseño en múltiples circunstancias. Pero, ¿cómo delimitarlo? ¿Hasta qué punto es o deja de ser? ¿Por qué empleamos el término si no es el más apropiado para aludir a alguna actividad?
Disegno, es una palabra italiana que surge en el S. XVI para referirse a un trazo o boceto, dibujo. Design, es el término utilizado en Francia y Estados Unidos.
Del latín Designare/Dessignare surge Signum/Signo/Signare, y éste nombra toda la realidad material y remite a otra realidad diferente. Da orden, poder, jerarquía y, por lo tanto, comunica e identifica.
De la misma raíz Designare se deriva Designar y se define como: Representación de una realidad por medio de una palabra o conjunto de palabras / Formar designio de realizar (un trabajo) / Denominar, determinar (una persona o cosa) por su nombre o rasgo distinto/ Señalar (una persona o cosa) para determinado fin.
Entonces, retomando lo anterior y etimológicamente hablando, el diseño puede implementarse en prácticamente cualquier ámbito y por esa razón es fácilmente mal empleado. Pero, delimitando el concepto, ¿qué es diseño? En primera instancia, el diseño es una interdisciplina pero éste (a pesar de retomar y a su vez aportar en diferentes áreas del conocimiento) basa mucho de su “esencia” en el dibujo y el arte (como se define Disegno en Italia). Le resulta al diseñador indispensable para su labor los conocimientos básicos del arte ya que son éstos el cimiento práctico e intelectual que iniciará a cualquier persona en el ámbito del diseño.
Por otra parte, Signum y Designare si bien tienen maneras distintas de emplearse en la actualidad, en contexto no son ajenos y ambos términos se complementan. El primero nos habla de ordenar, identificar y nombrar; el segundo de determinar, representar y señalar. Por lo tanto, el Diseño reúne también éstas características pues (más allá de ser visualmente atractivo, “bonito” u original) un buen diseño, identifica, representa, señala y ordena elementos para que el espectador no sólo lo contemple, sino que él mismo le comunique una acción y ésta se realice.
El Diseño es, en consecuencia, una disciplina que contempla el arte y el dibujo para su elaboración. Gráficamente representa elementos que pueden identificarse y ser denominados. Partiendo de su raíz, el diseño ordena y jerarquiza, ya que “signa”. No apliquemos la palabra “Diseño” como si la definición fuese sinónimo de “elaborar o hacer”. El diseño requiere ser actuado y utilizado; el diseño funciona y comunica.
Hoy en día nos referimos al diseño en múltiples circunstancias. Pero, ¿cómo delimitarlo? ¿Hasta qué punto es o deja de ser? ¿Por qué empleamos el término si no es el más apropiado para aludir a alguna actividad?
Disegno, es una palabra italiana que surge en el S. XVI para referirse a un trazo o boceto, dibujo. Design, es el término utilizado en Francia y Estados Unidos.
Del latín Designare/Dessignare surge Signum/Signo/Signare, y éste nombra toda la realidad material y remite a otra realidad diferente. Da orden, poder, jerarquía y, por lo tanto, comunica e identifica.
De la misma raíz Designare se deriva Designar y se define como: Representación de una realidad por medio de una palabra o conjunto de palabras / Formar designio de realizar (un trabajo) / Denominar, determinar (una persona o cosa) por su nombre o rasgo distinto/ Señalar (una persona o cosa) para determinado fin.
Entonces, retomando lo anterior y etimológicamente hablando, el diseño puede implementarse en prácticamente cualquier ámbito y por esa razón es fácilmente mal empleado. Pero, delimitando el concepto, ¿qué es diseño? En primera instancia, el diseño es una interdisciplina pero éste (a pesar de retomar y a su vez aportar en diferentes áreas del conocimiento) basa mucho de su “esencia” en el dibujo y el arte (como se define Disegno en Italia). Le resulta al diseñador indispensable para su labor los conocimientos básicos del arte ya que son éstos el cimiento práctico e intelectual que iniciará a cualquier persona en el ámbito del diseño.
Por otra parte, Signum y Designare si bien tienen maneras distintas de emplearse en la actualidad, en contexto no son ajenos y ambos términos se complementan. El primero nos habla de ordenar, identificar y nombrar; el segundo de determinar, representar y señalar. Por lo tanto, el Diseño reúne también éstas características pues (más allá de ser visualmente atractivo, “bonito” u original) un buen diseño, identifica, representa, señala y ordena elementos para que el espectador no sólo lo contemple, sino que él mismo le comunique una acción y ésta se realice.
El Diseño es, en consecuencia, una disciplina que contempla el arte y el dibujo para su elaboración. Gráficamente representa elementos que pueden identificarse y ser denominados. Partiendo de su raíz, el diseño ordena y jerarquiza, ya que “signa”. No apliquemos la palabra “Diseño” como si la definición fuese sinónimo de “elaborar o hacer”. El diseño requiere ser actuado y utilizado; el diseño funciona y comunica.
